05.12.2025
Fundación Telefónica colabora en el Informe Voluntare 2025 que consolida el voluntariado corporativo como herramienta estratégica de impacto social
Foto grupal presentación 'Informe Voluntare 2025'

En la foto, Benedetta Falletti, directora de Voluntare; Jordi Pastó, director de Impacto Social y Voluntariado CaixaBank; Pilar Pelles, responsable de Voluntariado y proyectos sociales de Fundación Repsol e Inés Temes, directora de Innovación Social, Educación, Empleo y Voluntariado de Fundación Telefónica. Y las voluntarias Cristina Llanas, Voluntariado CaixaBank; Rocío Bustamante, Fundación Telefónica y María Iglesias Calvo, Fundación Repsol.
El estudio, presentado en el Día Internacional del Voluntariado, analiza las tendencias del voluntariado corporativo en Europa y Latinoamérica con la participación de 236 organizaciones, y anticipa oportunidades de cara al Año Internacional de los Voluntarios 2026.
Fundación Telefónica ha participado en la elaboración del ‘Informe Voluntare 2025’, un estudio que concluye que el voluntariado corporativo se ha consolidado en los últimos años como un pilar fundamental de la estrategia social y de gestión del talento de las empresas. El 97% de las organizaciones analizadas ya ofrece actividades de voluntariado en horario laboral, frente al 82% registrado en 2015.
El informe, presentado con motivo del Día Internacional del Voluntariado y realizado por Voluntare en colaboración con la Universidad de Almería, cuenta con el apoyo de Fundación Telefónica, Voluntariado CaixaBank y Fundación Repsol. El análisis recoge información de 236 organizaciones de Europa y Latinoamérica y se publica en vísperas del lanzamiento de 2026 como Año Internacional de los Voluntarios para el Desarrollo de Naciones Unidas.
El voluntariado ha pasado de ser un pilar de la estrategia social de las empresas
Crecimiento de la participación y compromiso estratégico
Esta tercera edición del estudio, que se realiza con carácter quinquenal desde 2015, revela un crecimiento significativo en la participación de los empleados. El 77% de las organizaciones moviliza actualmente a más del 10% de su plantilla, un dato que contrasta con el 29% de hace diez años. Además, el 45% de las empresas consigue movilizar al 20% de sus empleados, lo que significa que en casi la mitad de las compañías uno de cada cinco trabajadores participa en acciones de voluntariado corporativo.
El informe refleja que más del 93% de las organizaciones confía en que su programa de voluntariado crecerá en los próximos años, consolidándolo como pilar estructural de su estrategia social y de gestión del talento. Este cambio responde a una transformación en la que el voluntariado ha dejado de entenderse como una acción aislada para convertirse en una palanca de transformación cultural y social dentro de la empresa.
Entre los principales beneficios identificados por las compañías destacan el desarrollo de competencias (97%), el fortalecimiento del orgullo de pertenencia y la motivación (97,7%), y la promoción de las relaciones y el compromiso de la organización con la comunidad (98,4%). Asimismo, el 91,5% de las empresas impulsa el voluntariado para mejorar su capacidad futura de atracción de talento.
Tres tendencias que marcarán el futuro
El estudio identifica tres grandes tendencias que definirán el futuro inmediato del voluntariado corporativo. En primer lugar, la digitalización y el voluntariado virtual, un modelo híbrido impulsado tras la pandemia que se ha consolidado como modalidad permanente.
«En Fundación Telefónica, por nuestro ADN, queremos explorar las oportunidades que ofrece la tecnología al voluntariado, para lograr el máximo impacto social en las personas: ello incluye el diseño inclusivo y ético de la tecnología, la reducción de brechas digitales, o el acercamiento de carreras STEM a mujeres», señala Inés Temes, directora de Innovación Social, Educación, Empleo y Voluntariado de Fundación Telefónica.
En segundo lugar, el voluntariado basado en habilidades y conocimientos técnicos gana peso, ya que las empresas apuestan cada vez más por conectar las competencias profesionales de sus empleados con causas sociales para aumentar su impacto. En tercer lugar, la cultura de alianzas se consolida como rasgo característico de los programas actuales, siendo la colaboración con entidades sociales, comunidades locales y otras empresas un aspecto clave para generar impacto sistémico.

Diferencias regionales y respuesta ante emergencias
El informe detecta diferencias regionales que enriquecen la visión global del fenómeno. En Europa, el reto pasa por movilizar más voluntarios, reforzar la innovación y seguir aumentando el compromiso de la alta dirección, mientras que en Latinoamérica el foco está en profesionalizar la gestión y ampliar los recursos. Ambas regiones coinciden en priorizar la tecnología, la formación de gestores y la medición del impacto social, así como en integrar el voluntariado en la cultura corporativa.
En un capítulo dedicado a la respuesta del voluntariado ante crisis y emergencias, el informe recoge que existe una mayor participación y movilización en circunstancias excepcionales, con una rápida capacidad de respuesta por parte de las empresas que cuentan con presupuesto específico y planes preparados ante posibles eventualidades.
La participación crece: el 77% de las organizaciones moviliza a más
del 10% de su plantilla, y el 45% supera el 20%