El extracto cumple dos funciones fundamentales: ofrece una visión general de tu carrera profesional, y engancha al profesional que visita tu perfil… permanece más tiempo en él.
¡Recuerda! Cuando estamos trabajando en nuestra marca personal o nuestro objetivo es encontrar un empleo, tenemos que tener claro que nuestro perfil de LinkedIn debe estar cuidado y actualizado. La lectura de los expertos reclutadores sería la siguiente: perfil que aparece en los buscadores, foto, cargos y nuestra experiencia y, por último, el extracto. El extracto es una de las secciones más leídas del perfil. ¡Pero no te preocupes! Vamos a ver a continuación algunas pautas para mejorarlo.
Debes provocar interés y recuerdo
Es la mejor forma de que nos valoren y de poder conseguir nuestros objetivos. ¡Sé creativo! Tienes 2.000 caracteres, aunque recuerda que no tienes por qué usar todo el espacio, aprovecha para presentarte y contar:
– Quién eres.
– Qué sabes hacer.
– Cómo lo haces.
– Con qué tipo de perfiles te gustaría contactar.
– Cómo vas a beneficiar a las empresas con tu experiencia.
Antes, conócete mejor
Lo primero que debes hacer, antes de escribir el extracto, es conocerte a ti mismo y poner en marcha tu análisis DAFO personal. Es un método que sirve para plantear cuál será nuestra estrategia para conseguir nuestros objetivos y para, finalmente, escribir nuestro extracto en LinkedIn. Este método se divide en cuatro secciones: Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades. Estas, a su vez, se recopilan en dos bloques:
– Análisis interno:los aspectos importantes de nuestro perfil profesional (Debilidades y Fortalezas).
– Análisis Externo: muestra el entorno empresarial y contexto laboral en los que nos situamos como profesionales (Amenazas y Oportunidades).
Ahora nos centraremos en las Fortalezas y Oportunidades porque son las que nos ayudarán a saber qué redactar en nuestro extracto, mostrando nuestro lado más positivo, siendo sinceros y contestando a estas preguntas:
Fortalezas:
– ¿Cuál es mi mayor virtud?
– ¿Qué actividad es la que más me apasiona?
– ¿Qué hago mejor que los demás?
Oportunidades
– ¿Qué aspectos externos pueden facilitarme conseguir mis objetivos?
– ¿Puedo ofrecer algo positivo en el sector?
– ¿Qué recursos tengo que me acercan a conseguir mi meta?
Recopila todas las respuestas en una lista y verás que ya tendrás las líneas fundamentales que te definen.
Información argumentada
El en extracto debes transmitir aspectos básicos con ejemplos y experiencias que reflejen, por ejemplo, la buena actitud para los nuevos retos, la flexibilidad y capacidades para adaptarse a cualquier tipo de empresa. ¡Y no te olvides de tus capacidades humanas!
– Demostrar las capacidades para un nuevo empleo: convence al reclutador de que estás preparado para asumir las funciones del puesto, así que vamos a informar de los proyectos y tareas que hemos llevado a cabo, cómo lo hicimos, cuál fue nuestra aportación a nivel profesional y qué supusieron para nosotros a nivel personal.
– Positividad: ofrece algunos datos sobre los resultados positivos de esos proyectos mencionados.
– Capacidad de adaptación: demuestra tu flexibilidad, trabajo en equipo, aclimatación a cambios en la empresa. Pon ejemplos de experiencias pasadas, de los equipos con los que tuviste la suerte de trabajar, los aprendizajes que obtuviste. También, si fuera el caso, de tu capacidad de liderazgo.
Y, para terminar, una llamada a la acción. Deja claro lo que quieres que pase. Por ejemplo, “Solicita mi CV para conocer más sobre mi perfil e historial profesional” o «Si le interesa convocarme para un proceso de selección, no dude en contactar conmigo”. También te recomendamos añadir cualquier recurso audiovisual que pueda aportar valor.
En resumen:
